Existe una especio de monopolio o privilegio que poseen determinados servicios en todo el mundo que, aunque en principio sólo seamos capaces de distinguir sus ventajas, a la larga perjudican en gran medida a los consumidores, que finalmente acaban siendo los más perjudicados en este asunto. Este es un caso aplicable a Google.
Su creación, como la de la mayoría de las cosas que comienzan a funcionar partiendo de un proyecto inicial, comenzó desde abajo. Nació con el propósito de “ayudar” a dos estudiantes americanos a realizar su tesis doctoral para así poner fin a su carrera universitaria. Pero no fue exactamente Google lo que inicialmente se creó, sino un proyecto basado en un sistema capaz de descubrir enlaces en la red. Y así, a través de investigaciones, los ambiciosos Larry Page y Sergey Brin fueron perfeccionando el invento hasta dar con lo que a día de hoy conocemos con el nombre de Google.
Si existiera una jerarquía establecida a cerca del grado de utilidad y éxito de todos los buscadores existentes en la red, Google encabezaría la lista con una desmedida ventaja. Según diferentes estudios, el grado de centralización de Google en nuestro país (99%) es inquietante a la vez que angustioso. Este dato refleja la mentalidad de las personas, que el lugar de indagar se conforman con tener a Google como único motor de búsqueda, lo que perjudica gravemente al usuario que pone en práctica los servicios (“activo”) como al que no los tiene tan en cuenta (“pasivo”).
Esta historia, a nuestro parecer, encierra un grave problema. Y es el hecho de comprobar que el mundo entero esta a los pies de este gran motor de búsqueda, como si no existiese nada mas eficaz, y fructífero capaz de satisfacer nuestras necesidades igual o incluso en mayor medida.
"Bibliografía": Datos y comentarios extraidos de la práctica 2 de CPCR del Grupo 4.
Video extraido de YouTube: http://www.youtube.com/watch?v=ZWs3pmJndq8
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